"Si no arriesgas, no ganas."

Arriesgar y ganar. Luchar y vencer. Creer en ti. Creer en mí. Creer en nosotros. Lograrlo. Quizá a lo único a lo que tenga miedo sea a caer antes que tú. O a ser incapaz de deshacer el lazo que nos va uniendo. El cual, siendo honesta conmigo misma, voy atando cada día con más fuerza. Insisto, lo sé. Pero tiene que ser lo suficientemente resistente para combatir cualquier rotura posible. No obstante,¿qué supone una rotura en un campo de batalla que tantas guerras ha librado ya? Porque, seamos claros, para guerras y combates...los nuestros. Para resistencia...la mía. Para fuerza...la tuya. Podría decir que es una batalla ganada, la que hemos combatido. Cuya celebración es resumida en millones de miradas, caricias y sonrisas. Mas, no lo dudo. Puedo declarar personalmente que arriesgué, y gané. Y qué mejor trofeo...que poder estar a tu lado.

Quizás soy yo, que sueño con tener el firmamento algún día entre mis manos. O quizás eres tú, que con dos luceros por ojos, eres capaz de iluminarlo. Quizás soy yo, que ya no aguanto la oscuridad sin tu luz...ni el frío sin tus manos. O quizás eres tú, que me proteges con miradas y me resguardas con tus brazos. Quizás soy yo…que vencería mil y una batallas por tenerte a mi lado. O quizás eres tú, que con sólo tus caricias, me ayudarías a lograrlo. Quizás soy yo, que pondría la mano en el fuego para llevarte conmigo a lo más alto. O quizá eres tú, que sonriendo y de la mano, me acompañarías sin dudarlo.